Un ángel me dijo:
No temas,
Fluye como la vida que corre por tu ser.
Confía,
Que la gracia llega a través de mucho caminar.
Desprendido, sintiendo tu ser,
Con amor, con
luz.
Compartiendo la gracia de la vida,
Con cada ser que toca tu alma.
Busca siempre,
Se sencillo y simple,
Permitiéndote equivocar y sentir,
Que tu alma vibra en orden y armonía.
Cuando mas te comprendas y aceptes ,
Comprenderás y aceptaras a los demás ,
Para unirse en una comunión de almas ,
Busca la paz en cada cosa,
Y aun si no la hay , eleva una plegaria al cielo,
Para pedir el mayor bien de cada ser ,
De toda la humanidad,
Para vivenciar ese cielo esperado dentro de cada uno.
Allí convive el cielo y el infierno,
Uno elige vibrar en esa frecuencia.
O echemos culpa a nadie por lo que ocurre,
Es acción y consecuencia de nuestros actos.
Deja atrás lo viejo e inservible,
No cargues tanto tu costal,
Pues el peso mantiene a tu ser sumido en un mismo lugar.
Tan solo elévate,
Confía en la bendición de cada día.
Tras la marcha uno debe afirmarse,
Es saber donde uno quiere estar y donde no,
Tan solo deben seguir su ideal e ir tras el.
Acércate al Padre,
En cada momento,
Hablando con el como si fuera tu amigo, de por si lo es.
Y te ama con todo su Ser,
Pues tu eres su hijo mas preciado y amado.
Expresa en acción el amor,
Y atraerás hacia ti todo ese caudal amoroso,
Para vibrar y ser ese amor nutrido,
De lo más elevado que tienes y vibra en ti.
Se feliz, ama, ríe, llora.
Estas vivo,
Eres parte sagrada del Padre.
Tu ángel de la guarda.
