domingo, 15 de enero de 2012

Poema: Encontrarte

Muero cada día en el ocaso

y nazco nuevamente con el alba,

buscando eternamente en cada paso,

el camino que me guíe hacia tu alma.

Un sendero colmado de ternura,

con jardines florecidos de ilusión,

su espacio impregnado de dulzura,

y un estanque saturado de pasión.

¿Cuál es el margen que debo seguir?

¡Tan solo Dios! Puede responder,

para luego, en el crepúsculo,ratar de no morir,

y a tu lado lograr amanecer.

sábado, 14 de enero de 2012

El árbol de la Felicidad

Cuentan que hace muchos años un peregrino, tras caminar durante infinitas jornadas bajo el implacable sol de la India, deseó en su corazón poder descansar a la sombra de un árbol que le diera cobijo. De pronto, divisó a lo lejos un frondoso árbol, solitario en medio de la planicie. Cubierto de sudor y tambaleándose sobre sus fatigados pies, se encaminó alegremente hacia su deseo hecho realidad. «Al fin podré descansar», pensó, mientras se abría paso entre las tupidas ramas, que llegaban hasta el suelo.
¿Qué más podía pedir? Tendiéndose sobre la tierra en su refugio vegetal, trató de conciliar el sueño, pero el suelo estaba duro. Cuanto más trataba de ignorar su incomodidad, más le costaba conciliar el sueño. «Si al menos tuviera una cama...», pensó.
Al momento surgió una imponente cama, con impolutas sábanas de seda, digna de un sultán. Brocados, lujosos tejidos de Samarkanda y las más suaves pieles cubrían el lecho. Y es que, sin saberlo, el peregrino había ido a sentarse bajo el mítico árbol de los deseos: aquel árbol milagroso era capaz de convertir en realidad cualquier deseo expresado bajo sus ramas.
El hombre se acostó en el mullido lecho relajándose. «¡Me siento tan a gusto!», dijo para sí. «Es una pena que tenga tanta hambre». Súbitamente, ante él apareció una espléndida mesa cubierta con los más sabrosos manjares: ricos y variados platos exquisitamente preparados y servidos en la más lujosa de las vajillas. Sobre las más finas telas imbricadas de hilos preciosos se mezclaban oro, plata y finísimo cristal con las más exóticas frutas y sabrosos postres. Todas estas maravillas tomaron forma ante sus asombrados ojos. Todo aquello con lo que siempre había soñado en las solitarias noches de su largo peregrinar estaba ahora ante él. Y cuanto más comía, más comida aparecía: cada nuevo manjar era aún más sabroso y exquisito que el anterior.
Finalmente se dijo: «Ya no puedo más»... y en ese mismo momento la mesa y todas sus maravillas se desvanecieron en el aire. Al peregrino le embargaba un sentimiento de profunda felicidad. «No me moveré de aquí y seré por siempre feliz», pensó. Pero, de pronto, una idea terrible surcó su mente: «Claro que esta planicie es famosa por sus feroces tigres. ¿Qué sucedería si un tigre me descubriese? Sería terrible morir justo después de haber encontrado el árbol de la felicidad».
Fue una fracción de segundo, pero bastó. Cumpliendo su deseo, en aquel momento surgió de la nada un terrible tigre que devoró al temeroso peregrino.
Y así el árbol de la felicidad se quedó solo de nuevo, esperando la llegada de un ser humano de corazón completamente puro, que no anteponga el miedo ni la desconfianza a la búsqueda de su felicidad y la de los demás.

lunes, 9 de enero de 2012

Canción: Levantar la voz

Hoy me he encontrado.

Ay me he encontrado y me escapé

pero algo me hizo volver

la voz de la razón, que olvide que tenia sol

se que no estas aquí para decirme

lo que siempre solías decirme,

pero esta escrito en el cielo esta noche.

Así que no me rendiré

no, no me derrumbare

antes de lo que tu crees tu vida se endereza.

y seré fuerte aunque todo salga mal

cuando me pare en la oscuridad.

igual seguiré creyendo

"alguien me esta cuidando"

He visto esa luz brillante

y esta iluminando mi destino.

brillando todo el tiempo y no tendré miedo

de seguirla a cualquier sitio que me lleve

solo se que el ayer

se ha ido. y en este momento pertenezco.

a este instante a mis sueños.

Así que no me rendiré

no, no me derrumbare

antes de lo que tu crees tu vida se endereza.

y seré fuerte aunque todo salga mal

cuando me pare en la oscuridad.

igual seguiré creyendo

"alguien me esta cuidando"

No importa lo que diga la gente

no me importa cuanto tiempo tome

cree en ti mismo y volaras alto

y solo importa cuan sincero seas

se fiel a ti mismo y sigue tu corazón

Así que no me rendiré

No, no me derrumbare

antes de lo que tu crees tu vida se endereza.

y seré fuerte aunque todo salga mal

cuando me pare en la oscuridad.

igual seguiré creyendo

"alguien me esta cuidando"

martes, 3 de enero de 2012

El Eco de la Vida

Un niño y su padre caminaban entre las montañas. De repente, el hijo tropezó y cayó al suelo gritando Aaahhh! Para su sorpresa, oyó una voz a lo lejos que gritaba como él.

Con curiosidad el niño preguntó: ¿Quién está ahí? ¿Quién está ahííí…? Le respondieron.

Molesto con la respuesta, el niño gritó: ¡Cobarde! Pero le respondieron de la misma manera: ¡Cobardeee…!

El niño desconcertado le preguntó a su padre: -¿Qué sucede papá? El padre, sonriendo le dijo: Hijo mío, presta atención.

Se levantó y dirigiéndose a la montaña, gritó: ¡Te admiro! La voz respondió: ¡Te admirooo...! Volvió a gritar: ¡Eres un campeón! Y la voz le respondió: ¡Eres un campeónnn...!

El niño estaba asombrado y no entendía. Se llama Eco, le explicó el padre, aunque en realidad es la vida. Te devuelve todo lo que dices o haces. Nuestra vida es simplemente un reflejo de nuestras acciones.

Si deseas más amor en el mundo, crea más amor a tu alrededor. Si deseas felicidad, da felicidad a los que te rodean. Si quieres recibir una sonrisa, sonríe a los que conoces.

Esta relación se aplica a todos los aspectos de la vida. La vida te dará de regreso, exactamente aquello que tú le has dado. Tu vida no es una coincidencia, es un reflejo tuyo.

Alguien dijo: Si no te gusta lo que recibes de vuelta, revisa muy bien lo que estás dando...

Se vive una sola vez...¡Que la vivas de la mejor manera!

El camello

"Había una vez un árabe que viajaba de noche . Sus esclavos, a la hora del descanso, se encontraron que no tenían mas de 19 estacas para atar a sus 20camellos .
Cuando consultaron al amo, éste les dijo : " Simulen que clavan una estaca. Cuando lleguan al camello número 20 creerá que esta atado."
Así lo hicieron efectivamente, y a la mañana siguiente todos los camellos estaban en su sitio, y el numero 20, al lado de lo que se imaginaba, sin moverse de allí. Al desatarlos para marcharse, todos se pusieron en movimiento menos el numero 20 que seguía quieto sin moverse . Entonces el amo dijo: - "Hagan el gesto de desatar la estaca de la cuerda, pues el tonto aun se cree atado ".
Así lo hicieron, y el camello entonces se paró y se puso a caminar con los demás "
¿Cuales son las falsas ataduras que te impiden ser tu mismo ? ¿ Habrá otros que te amarran a tu inautenticidad por
la cual no aspiras ser tu mismo?
Y, ¿por que no tratar de aprovechar al máximo tus inmensas potenciales aspirando ser tu mismo?

lunes, 2 de enero de 2012

La copa de la vida

La vida es una copa plena de felicidad, pero nunca se nos da llena.

Nos dan un sorbito de vez en cuando, un sorbito con el que tenemos que ir llenándola, gota a gota, todos los días, para sobrevivir.

No te la pases gimiendo tus desgracias, pronosticando tragedias imaginarias, o asustado por males, que probablemente nunca lleguen.

Nacemos para luchar por la felicidad, para crearla, para construirla a pesar de tristezas, desencantos, errores, malas jugadas e irremediables imprevistos.

La felicidad no se encuentra en bienes y placeres.

Se actúa bien y ella sola se va presentando.

La felicidad no es estar añorando todo lo que nos falta, sino acoplarnos a todo: lo que tenemos y lo que no tenemos.

No vendas tu felicidad...

¡Regálala!

No busques fórmulas sencillas, ni baratas para tenerla.

Ingredientes de la felicidad:

Compartir lo que tienes.

Amar sin exigencias.

Perdonar sin cicatrices.

Aceptar sin perfecciones.

Agradecer lo que te dan.

¡Y no rendirte nunca!

Todo tiene que ir armonizando:

Del panal, un poquito de miel.

Del mar, un poquito de sal.

De la vida, un toque de optimismo.

De la imaginación, sueños.

Del dolor, raíces fuertes.

Y de la fe, solidez de roca.

Porque no sabemos cómo llenar nuestra copa.

Porque no damos a la vida todo lo que podemos darle y

Esperamos, a veces ingenuamente, que la vida nos regale, pero sin pagar el precio.

¿Por qué no somos felices?

No olvidemos que la mejor manera de ser feliz, es:

Ocuparse de que otros lo sean,

dar sin esperar, servir con mucho AMOR y por AMOR.

Demos mucho de nosotros y la felicidad llegará sola. Llenemos nuestra copa y deleitémonos, siendo... ¡FELICES!